Aunque esperabas que tu recién nacido llorara con frecuencia, puede ser desconcertante oír a tu pequeño lanzar un gemido y no saber inmediatamente por qué. Entender las razones más comunes por las que los recién nacidos lloran puede ayudar a los padres y cuidadores a acotar lo que su bebé necesita y a encontrar formas de calmarlo.
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Razones comunes del llanto de los recién nacidos
Estas son algunas de las razones más comunes por las que los recién nacidos lloran y lo que puedes hacer para ayudarles:
Tienen hambre
Incluso los adultos nos ponemos de mal humor cuando tenemos hambre y a los recién nacidos les da mucha hambre, ésta es la razón más común por la que lloran. Como sus estómagos son tan pequeños, no pueden aguantar mucho tiempo, así que te avisarán cuando estén listos para su próxima comida. Algunas señales que indican que tienen hambre son chasquear los labios, llevarse las manos a la boca y buscar el seno, que es un reflejo que hace que los bebés giren la cabeza hacia ti cuando les rozas suavemente la mejilla.
Los bebés también lloran cuando están sobrealimentados. Si notas que se aleja del seno o del biberón, que se adormece o que cierra la boca, lo más probable es que se sienta lleno. Recuerda que hacer eructar al bebé a mitad o después de la toma también puede ayudar a reconfortarlo y a hacer la digestión si parece estar inquieto.
Tienen el pañal sucio
Por supuesto, al haber tomas frecuentes, ¡también hay deposiciones frecuentes! Aunque algunos bebés pueden tolerar un pañal sucio más que otros, los pañales sucios pueden ser incómodos e irritantes para los recién nacidos. Un episodio de llanto y un pañal maloliente son todas las señales que necesitas para saber que están listos para un cambio.
Están cansados
Como padres y cuidadores primerizos, conciliar el sueño al instante puede parecer una hazaña fácil. Pero los recién nacidos todavía están aprendiendo a dormirse y a veces necesitan un poco de calma para conseguirlo. Cuando los recién nacidos están en una etapa de alerta activa, verás que lanzan sus ojos de un lado a otro y que prueban nuevas habilidades motoras, como dar patadas con los pies o girar los brazos. Todo este movimiento puede provocar fatiga, lo que suele conducir a la etapa de llanto. Abrazar, mecer o envolver a los recién nacidos puede ayudarles a sentirse seguros para que puedan dormir un poco.
Necesitan ser consentidos
Tu recién nacido depende completamente de ti para comer, dormir y cambiar ese pañal sucio, pero también depende de tu amor y atención. Los recién nacidos lloran a menudo porque quieren que los sostengan en brazos, escuchar tu voz, olerte o mirarte a los ojos. El proceso del vínculo con un recién nacido es tan hermoso como importante para su desarrollo. Puede que lo único que necesites para aliviar su llanto sea sostener a tu bebé en brazos, pero también puedes probar a abrazarlo piel con piel. El abrazo piel con piel favorece el apego, refuerza su sistema inmunitario e incluso puede regular su temperatura corporal. ¿Necesitas tener las manos libres para enviar correos electrónicos, pasear al perro o doblar la ropa? Prueba a llevar a tu bebé en un portabebés aprobado para recién nacidos.
Tienen dolor
Cuando una comida, una siesta o un buen abrazo no le calman, el llanto puede indicar algún tipo de dolor o malestar. Las infecciones de oído, las irritaciones del pañal o la dentición pueden provocar un llanto excesivo. Si percibes que tu recién nacido tiene dolor y cualquier intento de calmarlo no parece ayudar, asegúrate de contactar con tu pediatra para que te oriente.
Por supuesto, los recién nacidos también lloran por otros motivos, como si están poco o demasiado estimulados, si tienen demasiado calor o demasiado frío, si tienen gases o si tienen cólicos. Conocer las razones más comunes por las que los recién nacidos lloran puede ayudarte a satisfacer sus necesidades para que se sientan tranquilos y consolados.